Qué es una merienda saludable para niños

¿Qué es merienda para niños?

La merienda saludable para niños es una de las comidas que nos ayudan a tener un aporte energético para afrontar el final de la tarde. Contribuye positivamente a que el organismo siga obteniendo nutrientes que ofrezcan distintos beneficios y que, por otro lado, se mantenga el régimen de comidas sin que haya alteraciones. De este modo, nos ayuda a gestionar un control en torno a las calorías que, generalmente, se distribuyen durante el día para que el metabolismo siga en pleno funcionamiento.

La merienda es una de las comidas preferidas de los niños. Se suele intercalar entre las actividades extraescolares que realizan a diario, algo que puede resultar factible si se quiere obtener un aporte de energía extra para continuar con el buen rendimiento físico e intelectual. Normalmente, se suele tomar a media tarde, aunque los horarios pueden variar según las costumbres y la persona. Todo es cuestión de crear un hábito de consumo que, al fin y al cabo, resulte adecuado a las necesidades y circunstancias personales. Este mecanismo puede ser útil para el día a día, algo que se verá reflejado en la propia productividad de la persona.

En ocasiones, no se le presta a la merienda la importancia que se debe. Puede haber días en los que no se realiza o, incluso, se puede llegar a consumir alimentos que no son adecuados. Los horarios y la falta de costumbre, puede llevarnos a que no siempre les preparemos a nuestros hijos la merienda; por eso, es preciso cuidar la costumbre de tener un horario fijo de merienda. De esta manera, conseguimos saciar el apetito y se extrae una dosis de energía y nutrientes que, obviamente, van a ser muy interesantes para aliviar la ansiedad que pueda generar el hambre, teniendo en cuenta que los más jóvenes suelen quemar muchas calorías con sus actividades diarias.

Esta comida se puede considerar un punto imprescindible en los niños. El simple hecho de no merendar incrementa el hambre y obliga al cuerpo a saciarse después en la cena, algo que es inapropiado teniendo en cuenta que en esta última comida no son necesarias tantas calorías si no se van a quemar; por tanto, no se necesita tanta cantidad de comida. En este sentido, merendar ayuda a que el metabolismo se encuentre plenamente activo y en desarrollo; además, ayuda a que el estado anímico se encuentre mucho mejor y se obtiene más energía como para desempeñar mejor todas las funciones físicas y cognitivas.

De todas formas, los niños entienden por merienda una comida con dulces que, en el fondo, están cargados de grasas saturadas y azúcar. Esto no resulta beneficioso, sino todo lo contrario. Puede incrementar la obesidad infantil y hacerles más propensos al desarrollo de enfermedades cardiovasculares y diabetes, sin olvidar otros trastornos alimenticios que pueden surgir a partir de una mala alimentación. Por esta razón, es conveniente valorar la idea de tener una dieta equilibrada y funcional que, en el fondo, pueda proporcionar todos los beneficios que necesita el cuerpo de una persona joven y evitar, así, los alimentos ultraprocesados que no son nada saludables.

¿Qué es una merienda saludable?

Una merienda saludable es aquella que ofrece alimentos ricos en nutrientes que son necesarios para el correcto funcionamiento del organismo. Se consumen únicamente aquellos productos que pueden ser apropiados para sacar distintos beneficios, ya que merendar es tan importante como desayunar. El aporte energético es algo indispensable si se quiere conseguir un buen rendimiento personal. Por un lado, se evitan grasas que puedan provocar problemas en el organismo o que supongan un incremento del peso corporal que no sea apropiado para la edad. 

La idea es que se consuman alimentos clasificados en la pirámide alimenticia y que son básicos en las dietas infantiles. La incorporación de vitaminas, minerales y antioxidantes hace que el cuerpo tenga los recursos apropiados para conseguir energía y ofrecer el mejor rendimiento físico e intelectual. 

Hay que tener en cuenta que un niño quema muchas calorías a diario; por eso, se debe tener en cuenta que el aporte calórico en su justa medida en la hora de la merienda, junto con los nutrientes esenciales, puede resultar adecuado a las necesidades individuales como para conseguir bienestar individual, algo que puede repercutir, incluso, en la consecución de la estabilidad emocional.

Además, hay que señalar que las proteínas son esenciales para que los músculos tengan un desarrollo y crecimiento natural. Se eliminan las grasas y se consigue una mayor musculatura que permite desempeñar diferentes actividades diarias, como puede ser en el caso del deporte. Las proteínas se convierten en las piezas fundamentales para mejorar el rendimiento individual y alcanzar un propósito muy claro: la mejora de la calidad de vida y la consecución de un estado de bienestar que se va a notar en distintos ámbitos de la vida de un niño.

Por otro lado, es preciso señalar que una merienda saludable es la antítesis a los alimentos azucarados que generan adicción y que, por otro lado, ocasionan malestar. En todo momento es preciso crear hábitos adecuados a temprana edad, es decir, si aprenden a comer bien y de forma saludable, van a conocer unos valores alimenticios que, indudablemente, van a quedar presentes el resto de sus vidas. El hecho de enseñarles a comer alimentos de buena calidad y naturales puede ser el aliciente imprescindible para evitar problemas de mayor envergadura y que adquieran un conocimiento en torno a un estilo de vida saludable.

¿Qué debe contener una merienda saludable para niños?

La merienda de los niños debe contener productos naturales y saludables. Existen infinidad de alimentos y recetas con las que podemos hacer meriendas elaboradas y otras más sencillas. Todo va a depender del tiempo que se tenga o si tienen que llevarse la merienda a sus actividades.

Por eso, queremos hacer un repaso de aquello que debe contener una merienda saludable para niños y todos los beneficios que proporciona. A continuación, se presentan los alimentos que pueden tomar protagonismo en las meriendas; en realidad, todo es cuestión de organizarla según los gustos o lo que se quiera comer.

• La fruta es, por supuesto, un recurso esencial. Hay muchas maneras de comerla, desde la pieza entera hasta en una macedonia donde se combinan distintas frutas. Son dulces y proporcionan energía, vitaminas y minerales.
• El pan integral puede ser un recurso adecuado para acompañar otros alimentos. Con él se pueden hacer tostadas o sandwiches.
• Si se desea una merienda rica en proteínas, el atún es una buena opción para comer con huevo, pechuga de pollo y tomate. Esto se puede combinar en una tosta o en formato bocadillo. La idea es que, con todos estos alimentos, se adquieran todos los elementos adecuados a las necesidades personales de cada uno.
• Los yogures son una rica opción gracias a que proporcionan calcio y proteínas, lo mismo que la leche. Es importante evitar el azúcar o aquellos yogures procesados con sabores. Se recomienda el natural al que se le puede echar miel y frutos secos.

¿Qué se puede comer de merienda saludable?

En una merienda saludable tenemos la oportunidad de combinar diferentes ingredientes y crear meriendas personalizadas. Del mismo modo, se puede combinar alimentos y hacer que cada día sea una merienda distinta para, así, no caer en la monotonía. Hay que tener en cuenta que los niños desean algo dulce; por tanto, se pueden crear opciones saludables realizadas artesanalmente en casa. Un caso en particular son las galletas y bizcochos caseros, realizados únicamente con ingredientes naturales, bajos en azúcares y evitando las grasas trans.

Otra muy buena opción son los helados caseros. Se puede hacer con zumo de frutas o empleando agua de coco combinado con frutas enteras para crear polos fríos que, en el fondo, son muy saludables y refrescan. Hay que tener en cuenta que los batidos naturales de frutas también se encuentran como una buena alternativa, teniendo en cuenta que se pueden hacer con leche.

Los bocadillos son, probablemente, el recurso más destacado en las meriendas. Se pueden hacer con diferentes ingredientes: pavo, tomate, pollo, aguacate… La crema de cacahuete también se puede tomar en una rebanada de pan. En el caso de que prefiera algo dulce, también podemos hacer nuestra propia crema de cacao empleando crema de avellanas, unos dátiles y cacao natural, una forma saludable de crear productos frescos y de buena calidad.